24/7/07

Un día en el cual todo se desvaneció

Si, de nuevo el problema de los parrafos con Blogger. Saludos.

Un día en el cual todo se desvaneció

Tenía la cabeza en blanco. Siempre salía al patio y miles de ideas revoloteaban en su cabeza. Pero esta vez no, desde hace meses ya no era lo mismo. No sabia a que atribuirlo, su vida no había sufrido cambio alguno, no habían ocurrido ni desgracias ni tragedias, no había motivo para aquel cambio. Cuando luego de tanto tiempo de aceptar sin más la situación se sentó en su jardín a pensar no llego a ninguna conclusión relevante, interesante o digna de ser escuchada. Sin embargo, dedicare algunas palabras a ellas: En primer lugar creía que el mismo reposo y la tranquilidad de su existencia podría influir e incluso ser la causante de la fuga de ideas. En segundo lugar contemplaba la posibilidad de que todo tenga un fin al que no debería buscársele causa. “Termino por que si” se aseguraba con poco convicción. Por ultimo creía que quizás todo lo que pensaba que había sido su vida era una imaginación (tanto de ella misma como de alguien mas), tinta de algún escritor o sueños de algún habitante del planeta. Claro que esto era lo más sencillo que podía pensar. Tal vez su correr incesante de días eran imágenes que conformaban una extensa película que se miraba a través de los caños de escape de los autos. Y a decir verdad, esta idea era la que mas le convencía de sus insignificantes conclusiones. El pensamiento que continuo fue una afirmación: “Aun puedo pensar, no lo habitual, no lo que quisiera, no con la misma rapidez y aun menos con la misma emoción, pero aun pienso”. Por supuesto a ella le resultaba incomprensible la idea de que se piensa todo el tiempo. “Uno no piensa a cualquier hora, tiene sus días, sus momentos especiales en el que se funde con la mente y queda atrapado en sus procesos” acostumbraba decirse a si misma y a su entorno. Este siempre se oponía a su idea “Se piensa siempre. En el momento de prepararnos el desayuno hasta cuando estamos al borde del sueño, cuando dormimos todo sigue ocurriendo” afirmaban. Ella se limitaba a disentir sin dar explicación alguna y muchos así concluían que ni siquiera entendía sus propias ideas. En cuanto a su consideración acerca del pensar sostenía que esta era una “tarea divina” mediante la cual uno se encontraba a si mismo y borraba el exterior de su percepción. Con su teoría, vivir pensando equivalía a vivir atrapado en su propio mundo interno privado del exterior, por lo tanto entregado a lo que vulgarmente la gente denomina locura. Volviendo a la afirmación: no le resulto un alivio. Sentía que sus capacidades se habían perdido en algún lugar… y ni siquiera habían tenido la cortesía de entregarle un mapa para localizarlos. Sufrió muchos días. Su sufrimiento se debía a la espera. Deseaba que algún día en su rutina diaria de salir al patio sus ideas volvieran y todo fuera como antes, aunque claro, ella no creía en que las experiencias se pudieran repetir. “Nadie baja dos veces al mismo río” había leído cuando era pequeña. Esa frase que al principio no comprendía luego fue una de sus certezas más preciadas. Nada podía ser como antes por el simple hecho de que ya existía la experiencia de la perdida de ideas, en el caso de recuperarlas esto constituiría un recuerdo que cambiaria la percepción del antes y después del hecho. Ya han pasado dos años desde este suceso. Hoy me pregunto por que les cuento esto, que finalidad tengo; y solo me encuentro con la duda. No lo se, pero quizás quieran saber que ocurrió con ella: Jamás recupero sus ideas, la causa es que nunca las perdió. A veces los seres humanos creemos que hemos perdido ciertas cosas mientras que estas en realidad no se han ido a ningún lado. Simplemente han mutado, han cambiado, han evolucionado.

15/7/07

Los Dos Mundos.

Dos cosas. La primera, traduzcan, porque siempre me hace lo mismo y no se como se hace para que no me junte los textos. 2. Cassandra querida, te toca a vos.. besos. Alguien conocido como Pelos Locos. Los Dos Mundos. De día, él, era esteban diaz. De noche.. él era Esteban Díaz.De día, manifestaba todo lo que pensaba.de noche, pensaba si lo que manifestaba tenía sentido. De día, el era un sujeto extravagante, conciente de serlo, fanático de los Guns And Roses que tarareaba Paradise City a cada momento. De noche, el rogaba por ser un hombre común, de que no lo asaltaran nuevas pesadillas respecto a sí mismo, de que no hubieran nuevas dudas sobre si mismo.De día, era querido y acompañado por sus amigos, de noche, un sujeto solitario, que si se lo encontraban caminando por el barrio a las tres de la madrugada, no reconocería a nadie. Así era la vida de esteban diaz y Esteban Díaz.Recuerdo una tarde, cuando le pregunté si no quería venir a mi casa esa noche, me respondió, con total seriedad: "No, de noche me pongo absurdo, insoportable, me saco todas mis mascaras, y soy solamente un hombrecito. No quiero que vean eso" Esteban, siempre era así con nosotros. Cada cosa que decía o hacía, parecía estar acompañada de magia, de una mística. Era un gran mentiroso, debo decirlo. Lo que decía, era tan convincente, y tan profundo, que era imposible no creerlo, aunque estuviera diciendo que El che guevara seguía vivo. Con la gente que no conocía o debo decir, de la que no había escuchado hablar (no se porqué nunca pude sorprenderlo con nada, siempre sabía de las personas mas que nosotros) era cerrado, y si en una primera impresión le caía mal, era destructivo. Cualquier cosa que esa persona dijera, el se la contradecía, y debo decir, que una sola vez lo ví salir mal parado de una discusión. Recuerdo una vez, cuando conocimos a un sujeto llamado Aldo, cuyo padre era militar, y él también simulaba serlo. Tenía un bolso camuflado con distintas insignias militares, cuando Esteban vió eso, resopló fuerte, el destestaba a los milicos. En determinado momento, ibamos los tres caminando por un pasillo, y Aldo le preguntó porque era tan callado. Esteban, con su peor cara de asco, le dijo "porque tengo miedo de que vengan los militares, caiga en un CDC, me lleven a una celda inhumana, me saquen solamente para ponerme electricidad en las pelotas, me violen mentalmente, hasta no saber como me llamo, ser simplemente un número, y, si tengo suerte, que me maten" Así era cuando algo no le gustaba. Picante, Ironico. Aldo se quedó callado. Recuerdo una tarde, cuando yo me encontraba triste, y le dije a Esteban que necesitaba pedirle un consejo. " A las seis en mi casa, pero traete vos los vinos". No maximizaba nada hasta que no necesitaba hacerlo.El era amante del vino. (la otra bebida que lo vi tomar ademas del vino, era, generalmente, ginebra) recuerdo una vez que me dijo lo que el pensabadel vino: " es una bebida oscura y ambigua. Tiene la cualidad de dejarse saborear, uno puede hablarle al vino, mientras va pasando por la garganta, le cuenta sus miedos, sus mejores chistes, y también, sus peores temores. Algo parecido dijo un tal Giardinelli. Tambien tiene la virtud de soltar la lengua. Eso que le contamos al vino mientras va pasando por la garganta, luego se lo contamos a nuestra compañia, y si estamos solos, lo escribimos. Eso por virtud. Su defecto, el que mas temo, es la resaca de la mañana".Solo cuando había tomado era simpatico, o gracioso. No dije borracho, dije que habia tomado. Así también, para escuchar o aconsejar a una persona (y que eso no le fuera aburrido) nececitaba un vaso o dos de vino en la sangre, no podía soltar lo que pensaba, no podía aconsejar ni dar un punto de vida concreto sobre una persona, si se encontraba deliberadamente sobrio. Pero para contar sus miedos, sus amores, o sus problemas, debía estar completamente ebrio, cuando sabía que al día siguente vendría lo que temia. La resaca.Una vez, mientras discutiamos, le dije que realmente el no me conocía. Su cara cambió de la alegría (nada le gustaba mas que discutir, o debo decir, que despues de tomar, su otra cosa favorita era discutir) a ese rostro que tantos sentimientos me despertaba, tantas dudas, era tan ambiguo cuando pensaba. En ese momento empezó adarme una descripción completa de quien creía ser yo. Y después, de quien realmente era. Me quedé estupefacto. Nadie, nisiquiera yo mismo, podía decir quien era. Pero el sí lo sabía. O me había convencido. Se que por la forma de mirar y de hablar de las personas el podía guiarse sobre quien era el otro. Me lo dijo una vez, pues, invariablemente, solo sabiamos de él, las cosas que nos decía. El resto eran suposisiones, que el se encarga de derribar. Hoy lo recuerdo casi como un mito. No se si realmente era tan como lo describo. Una vez me contó que estaba enamorado. Lo recuerdo claramente... estabamos sentados en su habitación, tomando mate y escuchando, invariablemente, los Guns And Roses. Tenía la cualidad de poder sorprendernos todo el tiempo, desde decir una cosa, y a continuación, otra que contradijera completamente lo anterior. O confesar algo sin estar ebrio, aunque eso sucedió solo esta vez. O, con toda la seriedad del mundo, hacernos una broma pesada... Su risa era tan ambigua.. se reía, tosía, pero era una risa fuerte, estrepitosa, conciente de su "risedad"... parecía que los planetas se alinearan, que aparecieran las manos de Peron, que reviviera el Che guevara, o que Esteban se ríera. Esas cosas que nunca suceden. Volviendo a su confesión sobria. Estabamos cantando Yesterdays y de repente, me miró y puso esa cara seria como una piedra, casi que daba miedo. Y después, cuando yo me atormenté, pensando que había echo algo malo, se rió.Yo lo insulté, le pregunté si era boludo o estaba borracho. Su respuesta volvió a dejarme helado." Mi vieja no es ninguna puta, boludos somos todos por vivir, y borracho, no estoy, o no concientemente. Pero te quiero contar algo breve, que me tiene inquieto". Su breve se prolongó una hora y media. Tenía esa facilidad para describir las cosas, que todo nos pareciera tan hermoso, aunque estuviera hablando de Mónica, una preceptora gorda y horrible que compartimos en el secundario. Me dijo que se llamaba Gabriela. Que el nombre en sí no le gustaba. Pero que tenía unos ojos hermosos. Y que sobretodo, lo entendía. Pero no mucho. Para que no se acostumbre. Después de decirme eso, se cortó en seco. Subió el volúmen de la música al maximo, durante media hora, que estuvo como metido dentro de si mismo, los ojos se le habían apagado. Levantó la vista, buscó las sillas se sentó en el respaldar de una, se encendió un cigarrillo y volvió a caer en ese sopor. El cigarrillo se le consumió entero en la mano, sin que Esteban lo tocara apenas. En ese momento estaba opaco, sin brillo, como si hubiera dejado de funcionar.- Vos sabés que no sé si te tendría que haber contado todo esto. Mañana me voy. - A donde te vas a ir?- lo subestime un poco. No se. Ya veremos.. el destino nunca es lo esencial. Y era verdad, nomás. Al día siguiente no apareció. Ni ninguno de los que siguieron. Hace cuatro años, me pregunté si el de veras existio. Y la verdad, es que no lo sé. Asique si es que existía, hace seis años, cuatro meses y tres días que se fue. Aún lo espero para tomar mate cuando vuelva, como me prometió. O quizás haya perdido mi número de telefono.

4/7/07

Empezando (?)

Gracias a una idea que se me ocurrió una noche de insomnio, (probablemente anoche) se me ocurrió esto de tener blog compartido. No les prometo que va a estar bueno, pero les prometo que no los voy a obligar a comentar. Le transmití mi idea a mi amiga cassandra, y acá estamos, ya somos dos. Si alguien se quiere prender, bienvenido sea. Abrazos. [Pelos Locos]